(…)Me duele. Hoy me corte el pié con un trozo de vidrio k estaba en la ducha... donde había escindido las botellas para que mi padre no las viera. Y es que cuando todo el mundo dice que el primer pasó de sanarse del alcoholismo es simplemente asumirlo. Yo lo asumí hace tiempo. Tengo asumido que soy dependiente de una sustancia que me esta consumiendo por dentro. Asumí que con esta vida no podré tener la capacidad de hacer una familia ni mucho menos tener hijos, como hace un tiempo me hubiese gustado tenerlos. Asumí que mis amigas se alejaron y que la persona que amo está más perdida dentro de mi problema que yo. Asumí que la cagué, que cague mi vida solo por llevar la contra. Que tengo lleno de botellas vacías mi pieza y busco cada día la estrategia para botarlas sin que mis viejos se den cuenta. Menos mal que no le hago a la marihuana, porque de esa forma dejaría la pieza pasá a mierda. Me cacharían altiro y seguiría sin encontrar la forma de evadir la vida que he construido. Nótese, la que he construido y lo la que me tocó vivir. La gente elige su destino. O por lo menos con mi perceptibilidad así lo hice yo. Yo elegí mi vida. Ahora no me puedo quejar. Eso también lo asumí. No me puedo quejar de la perra vida que llevo y de lo fea que me he puesto. Porque yo me lo busqué. Porque yo te aleje de mi vida y yo deje de luchar por lo que quería. Yo deje de querer luchar...yo deje de querer. Ahora, con un vidrio de tres cm. de largo enterrado en mi pié, trataré de borrar los rastros de sangre, de vidrio, de dolor y de alcohol que anoche me acompañaron. Y hoy me hacen la vida imposible. Y es así todos los días. Y es así todas las noches. Sin contarle si a mi mejor amigo ni a mi madre. Y si, desearía que estuvieras aquí porque eres la única persona que me decía que era una mierda pero la única que me motivaba a dejar de serlo... Tu también me gustaría que no te hubieras ido, porque tu sin decirme que era una mierda, me hacías valorar el hecho de serlo al no tener responsabilidades con nadie. Y a ti Tb. te extraño, si, a ti que me decías diariamente que eras la mejor amiga que tenías. Que jamás podría ser una mierda. Y que me amabas así tal cual yo era contigo y con el mundo. Y extraño a los que confiaban en mí. A esos que me hacían mierda con sus problemas y a los que les hecho la culpa todos los días de despertar con el hachazo y con la vuelta cada día más dolorosa a la realidad. Y extraño a los que no me pescaban poruqe me hacían sentir normal. Me hacían sentir como era. Invisible. Y es que extraño a mis sobrinas y a mis padres, a mis hermanos y a mi nana, a los cabros de reñaca y a los Minos del san Ignacio del Bosque, a mis compañeras de párvulos y a las del SSCC de las monjas francesas. Extraño a mi abuela, era una mierda, pero lo más `parecido a la forma en que me proyecto en 50 años más. Extraño la casa del campo, los caballos, el olor a transparencia. Echo de menos el GYM, la música como antes la escuchaba y los libros que me leía las tardes de sábado que todas andaban tomándose un helado con sus Minos en el bravísimo. Extraño mi ropa de temporada y mis kilos bajo peso. Extraño luchar contra las espinillas e ir a la peluquería con los ahorros de mis trabajos esporádicos. Extraño la época en que aun no asumía todo esto, cuando pensaba que tenía todo controlado. Extraño el sabor real de los chocolates cuando me tiraba en mi cama a comer como chancha, hecho de menos mi boca sin sabor a cigarro, y con sabor a mierda de hombre. Extraño acostarme en el pasto y mirar las estrellas. Disfrutar de la gente, observarla, analizarla, disfrutar caminar rodeado de gente y no pensar en que todas te pueden dañar. Extraño la época en que no era el monstruo que soy ahora. Extraño la época en que la vida se me hacía más fácil y desaprovechaba oportunidades de ser feliz a cada rato. Extraño estar fuera de mi pieza, extraño la soledad, la incomunicación, pero no que me dejen sola, no ser invisible. Extraño los viajes a bahía Inglesa contigo, cuando estábamos juntos. Extraño que me cagaras, odiarte por eso, sentirme inteligente al hacer lo mismo por ti. Extraño ataque de celos hacia ti, extraño aunque sea lo más mínimo por lo que antes luchaba… Extraño no estar tan metida en mi misma... Extraño tanto sentirme humana(…)